Será propósito del mismo realizar actividades conjuntas en materia de capacitación, investigación, extensión y cualquier otra acción específica o docente que resulte de interés común para el desarrollo potencial de ambas instituciones.
El acto fue presidido por el Rector de la Universidad, Lic. Francisco Morea, por el Presidente del Archivo Nacional de la Memoria, Gustavo Peters Castro, y Ana Pecoraro, Coordinadora del Faro de la Memoria.
El Rector Morea destacó que este acuerdo es de gran importancia para la Universidad por distintos motivos. Por un lado lo académico, y esto da la posibilidad a los miembros de esta Institución de acceder a información que de otra forma no tendría, pero lo más importante señalo el Rector es "mantener viva una cuestión que ha dejado heridas muy importantes en nuestra sociedad y que de alguna manera hay que ir trabajando para que así quede la documentación necesaria y las futuras generaciones tengan elementos para saber lo que hemos vivido en nuestro país".
Por su parte Gustavo Peters Castro señaló que este Convenio abre la puerta para poder trabajar en temáticas relacionadas con lo que es la Memoria y la profundización respecto a los Derechos Humanos. "Es muy importante que tanto el Estado como Instituciones Públicas como la Universidad puedan trabajar de manera conjunta. Como Presidente del Archivo Nacional de la Memoria el hecho de poder transmitir a las generaciones venideras lo que ha sucedido en la Argentina en momentos aciagos como fueron los años de 1976 a 1983, y que esto pueda ser transmitido a todas las generaciones que nos van a suceder es trascendente". El Presidente del Archivo Nacional de la Memoria hizo hincapié que se está trabajando en ese sentido ya como política de la Secretaria de Derechos Humanos donde los sitios de la memoria son una parte importantísima porque es la "vivencia de lo que nos pasó. Acá podemos ver, como en la Esma hasta donde llego la barbarie, por lo cual poder trabajar en estos sitios, darles todo el apoyo destacando la función de los responsables y la articulación que han logrado con la sociedad civil y con las instituciones públicas como en este caso la Universidad Nacional de Mar del Plata".
Finalmente Ana Pecoraro puso relevancia que esta firma es la concreción de un vínculo y un trabajo conjunto que viene desde antes de la apertura del espacio Faro de la Memoria. La Universidad estuvo en el 2013 cuando los Organismos de Derechos Humanos empezaron a pensar la apertura de este espacio, en ese momento la Universidad fue parte aportando mano de obra y después iniciando un vínculo de trabajo entre las diferentes áreas: unidades académicas, la Secretaria Académica y Biblioteca Central. Ana Pecoraro enfatizo que el "objetivo final es que la comunidad venga a este espacio que además de trabajar la memoria sea un Centro Cívico, un lugar de encuentro y un lugar de promoción de los Derechos Humanos. Estos convenios como el que ahora tenemos con la Universidad Nacional de Mar del Plata fortalecen e institucionalizan estos lugares que son nuevos para la sociedad porque son espacios que en todo el país no llevan más de 10 años y todavía hay un desconocimiento de los mismos. Todo esto es fundamental no solo para el ahora sino también para el futuro, para que las nuevas generaciones puedan acercarse a y entender no solo lo que fue la última dictadura sino todos los procesos represivos en Argentina".