¿Por qué paramos?
Paramos porque nos queremos libres, vivas y con trabajo. Porque la deuda es con nosotras y nosotres. Porque necesitamos la Emergencia Nacional en Violencia de Género, que el Estado garantice la atención efectiva a las víctimas y se desarrolle un Plan de prevención Integral.
Paramos porque nuestras tareas de cuidado siguen invisibles, y porque necesitamos que se implementen políticas de cuidados corresponsables que nos permitan desarrollarnos de la manera que queremos.
Porque necesitamos una Argentina sin hambre y con soberanía alimentaria.
Porque queremos Educación Sexual Integral en todos los ámbitos educativos, y que la implementación de la Ley Micaela pueda profundizarse.
Paramos porque exigimos Aborto Legal, Seguro y Gratuito, y que ninguna persona con capacidad de gestar muera o termine presa por abortos clandestinos. ¡Queremos ser soberanas de nuestros cuerpos y decisiones!
Paramos porque seguimos cobrando menos que nuestros compañeros varones, y porque la distribución de las tareas del hogar continúan siendo desiguales.
Porque los ámbitos en que nos desarrollamos son hostiles, y nos encontramos expuestas y expuestes al abuso, el acoso , la violencia en todas sus formas, el desprecio y el abandono.
Paramos porque no queremos más redes de trata y porque necesitamos erradicar el abuso infantil. Paramos porque la violencia de género mata.
Paramos porque estamos convencidas y convencides de que la Universidad Pública debe ser espacio de abordaje de esta problemática y ejemplo de que con prevención y sensibilización podemos construir sociedades más justas y equitativas, así como respetuosas de las diversas identidades y expresiones de género.
Actividades en el marco del 8M
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