Este proyecto, es uno de los 64 trabajos que resultaron elegidos, sobre un total de 900, que se presentaron en la Agencia de Promoción de la Investigación, el Desarrollo Tecnológico y la Innovación (Agencia I+D+i) que lanzó una convocatoria extraordinaria en el marco de la Unidad Coronavirus Covid 19, un dispositivo de coordinación impulsado por el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación.
"Desarrollo de geles, films y recubrimientos poliméricos para la elaboración de materiales de protección y de inactivación del COVID-19 de distintas superficies", es el nombre del trabajo que presentaron Álvarez y Lasalle, quienes dirigen una beca doctoral desde hace diez años juntas, y observaron que los materiales con los que trabajan, podían llegar a tener actividad frente al coronavirus. Así fue que redireccionaron la investigación para "ofrecer una respuesta a esta necesidad de contar con medios y recursos para ayudar a cortar el contagio y frenar la circulación del virus. No estábamos en esa línea, pero encontramos que el material en forma de gel que usábamos en la beca tenía esas propiedades. Así que adaptamos nuestra investigación", explicaron.
El objetivo que persiguen con esta investigación, es sintetizar materiales de base polimérica, de bajo costo, de simple preparación e implementación que resulten eficientes como herramientas para la prevención de infecciones y eliminación del virus Covid-19 de distintas superficies.
Vale recordar que la convocatoria de la Agencia I+D+i alcanzó a 64 iniciativas que fueron elegidas por 26 miembros de la comisión calificadora y recibirán, cada una, la suma máxima de 100.000 dólares.
Álvarez y Lasalle precisaron que el material es híbrido polimérico-inorgánico, y lo principal es que, además de ser antiviral y desinfectante, puede incluirse en matrices de distinto tipo. "En el proyecto tratamos de insertarlo en la producción de telas para indumentaria, ropa de protección sanitaria para quienes están en la trinchera contra el Covid-19, como mascarillas, guantes, ambos y otros insumos hospitalarios como sábanas. Pero además, por su versatilidad, podría ser recubrimiento de otras superficies de acceso masivo, como pisos y paredes de hospitales, edificios públicos como bancos o escuelas y desinfección de medios de transporte", comentaron.
Asimismo explicaron que lo que sucedería, es que "el virus se absorbe en la superficie del material, principalmente, por la comunidad que tiene con la composición del polímero, y en esa interacción química queda inactivado. Allí queda la membrana del virus y no puede generar el efecto de réplica y de contagio.
Lo que sucedería con el virus es que "se quedaría sin posibilidades de reproducirse" ya que se destruiría la membrana del coronavirus que es la que hace posible su ingreso a las células y genera el efecto tóxico".
El material antiviral podría estar listo entre 6 meses y un año, aseguraron las científicas que este viernes entregan el proyecto definitivo.